El ecosistema financiero de Colombia sin dudas está en un punto de inflexión muy importante de la mano de las fintech y las oportunidades de capturar y diversificar en un mercado con alta concentración bancaria. Según un reporte de Latitud, los 5 bancos más grandes de Colombia originaron el 70-85% de los préstamos, depósitos e ingresos bancarios de la última década, inclusive el año 2020. Esto significa que existen múltiples oportunidades para desarrollar nuevos segmentos de mercado y acceder a clientes tradicionalmente marginados del sistema bancario a través de herramientas innovadoras.
Es en este punto que las fintech y el Open Finance comenzaron a tomar el protagonismo de la escena colombiana de los últimos años. Así fueron surgiendo grandes capitales de inversión dispuestos a apostar por negocios innovadores que respondan a la falta de bancarización y de oferta de productos financieros. Esto significa grandes noticias para los usuarios, entidades financieras y demás participantes que conviven en este ecosistema.
Pero, ¿es lo mismo querer lanzar un negocio o nueva unidad de negocio de tarjetas de crédito que de cuentas digitales?, ¿son necesarias las autorizaciones y licencias de la Superintendencia Financiera de Colombia en todos los casos? Si tienes estas inquietudes porque quieres lanzar tu propia fintech o ya posees una empresa y quieres sumar unidades de negocio de productos financieros… puedes parar de buscar, ¡porque aquí tenemos las respuestas que necesitas para incursionar en el mercado de los servicios financieros en Colombia!
Lo primero que hay que saber: ¿qué regulaciones existen para las entidades financieras de Colombia?
Bueno, en principio es importante destacar que Colombia no cuenta con una regulación Fintech específica. Existen variadas leyes y disposiciones jurídicas, de mercado y de cara al consumidor que dan un marco para la creación de entidades que quieran ofrecer productos y servicios financieros.
Y para empezar a construir una idea de negocio, o considerar sumar servicios financieros a tu empresa ya existente, es importante saber que no siempre se necesita tener autorizaciones y licencias previas por parte de la Superintendencia Financiera de Colombia (SFC). Existe una pregunta central que definirá el camino a seguir con tu producto: ¿implica captación de dinero? Y con esto nos referimos a ofrecer depósitos a término como CDTs, o depósitos a la vista como cuentas digitales, cuentas de ahorro y/o corrientes o tarjetas de débito a tus clientes. Si la respuesta es sí, tu negocio deberá solicitar la autorización y licenciamiento de la mencionada superintendencia, antes de iniciar sus operaciones, y se someterá a su vigilancia.
Existen varios tipos de entidades que requieren de licencias para prestar servicios financieros que impliquen la captación de recursos del público. Esas licencias se solicitan ante la SFC, y una vez obtenidas, quedan sometidas a su vigilancia. Aquí te explicaremos brevemente las 3 más comunes:
- Sociedad especializada en depósitos y pagos electrónicos (SEDPE): permiten tener captación de recursos, abrir cuentas de depósito electrónicos y habilitar métodos de utilización como tarjetas de débito al igual que otros métodos electrónicos. Por esto, requieren de vigilancia por la SFC, ya que se trata de una sociedad que recibe recursos masivamente desde el público. Aunque las SEDPES son una de las entidades que menos capital requieren para su operación porque su capital mínimo es el más bajo, alrededor de USD 2 millones, no pueden hacer intermediación financiera. Es decir, no pueden tomar los fondos depositados por sus usuarios y colocar créditos al público.
- Establecimiento Bancario o Banco: se trata del establecimiento de crédito con las mayores capacidades y funciones, por lo tanto su licencia es una de las más complejas de conseguir y su monto de capital mínimo el más elevado. Permite intermediar recursos, es decir captarlos y prestarlos al público, sin embargo su capital mínimo puede rondar los 30 millones de dólares.
- Compañía de Financiamiento: Podría decirse que este es una entidad financiera vigilada intermedia entre las dos mencionadas anteriormente. Se trata de un establecimiento de crédito por el que se puede captar recursos y colocarlos en préstamos (intermediación financiera). Pueden captar recursos del público a través de depósitos a término y a la vista como cuentas de ahorro. Al tener la posibilidad de realizar intermediación financiera, pueden tomar los recursos de sus depositantes y emitir créditos a terceros a partir de ellos; estos servicios crediticios habitualmente son tarjetas de crédito, leasing, créditos de libre inversión, créditos empresariales, etc.
Es importante tener en cuenta que iniciar cualquiera de estos 3 caminos requiere no solo la aprobación por parte de la SFC, si no la construcción del plan de funcionamiento (MVP) de tu producto desde cero conectado con diferentes proveedores. Esto no es algo rápido, el tiempo que tarda la SFC en el proceso de autorización y licenciamiento es normalmente de un año o más. Pero varía según el tipo de licencia que se solicite y por supuesto, de tus recursos y disponibilidad para cumplir con todos los requisitos. Este plazo puede desalentar el lanzamiento de muchas ideas de negocio que podrían ser exitosas actualmente.
¿Y qué viene después?
Una vez que ya conoces los tipos de licencias más comunes a los que puedes apuntar, si tu interés es captar recursos del público, es importante que garantices que tu producto o modelo de negocio cumpla con las condiciones regulatorias según el caso. Y, llegado el momento de iniciar la solicitud de la autorización y licencia, es donde podrás optar por dos opciones:
- Radicar un proceso de filling de cara a la SFC: gestionar con los medios que con los que dispongas todos los requisitos que enmarca la regulación de la licencia a la que buscas aplicar. Como comentamos antes, este proceso puede tardar más de un año y requerir tiempo y recursos que no todo emprendimiento dispone.
- Buscar un partner que te gestione la licencia, es decir, el BaaS: Existen empresas que pueden proveer este tipo de soluciones y agilizar el time to market de productos o servicios financieros de largos meses a pocas semanas. Y sobre todo, posee costos más accesibles al tener todo ya resuelto.
¿Qué servicios financieros puedes lanzar sin necesidad de tener licencias?
Si tu idea de negocio no incluye la captación de dinero, seguramente se trate de un servicio financiero que no necesita autorización ni licenciamiento previos de la SFC y que, por tanto, puede emitir tarjetas de crédito o prepagas (con limitaciones), donde su operación y fondeo se apalanque de recursos propios de la sociedad, bien sea B2B o B2C. Por ejemplo: Lending, Crypto, Buy Now Pay Later (BNPL), Prepaid Services, Rewards, Delivery, Advances, etc.
Te dejamos algunos ejemplos de productos y servicios que puedes ofrecer sin necesidad de tramitar una licencia, y por lo tanto, con una salida al mercado más veloz:
- Dar préstamos con capital propio a través de tarjetas de crédito para que tus usuarios puedan hacer compras con el límite que poseen disponible. Gracias a este modelo de negocio, se puede generar ganancias con los intereses de financiación, las comisiones y el interchange fee.
- Crear tarjetas prepagas para gestionar la distribución de los fondos propios de tu empresa con un fin exclusivo. Un caso de uso aplicado podrían ser las empresas de Delivery, donde se otorga tarjetas prepagas a sus colaboradores para que realicen el pago de los pedidos que reciben desde la App directamente en los establecimientos. De esta manera se evita el uso de efectivo y los riesgos que esto acarrea mientras se facilita la conciliación de cuentas.
- Gift cards de programas de fidelización de clientes, o para hacer regalos, que no admiten recargas, es decir, que ya poseen un monto fijo para gastar.
- Unir tarjetas de crédito a billeteras crypto, en las cuales la tarjeta cumple la función de que el usuario pueda usar para acceder a cajeros automáticos y hacer compras. Todo esto, a través de líneas de crédito colateralizadas en el balance crypto de los usuarios, realizando operaciones en fiat de manera inmediata y con aceptación global.
- Tarjetas prepago o de crédito para gestión de gastos de flotas o corporativos en tu organización.
Existen empresas que ya tienen la capacidad de emisión de tarjetas con las principales banderas o franquicias y la infraestructura tecnológica homologada y certificada. También poseen resuelta la integración con diferentes proveedores, como embozadores y couriers, y ponen a disposición además el uso de su licencia financiera a terceros.
¡Llegamos al final!
Sin dudas Colombia es un país en gran desarrollo para el Baas y el Open Finance, regulación que se encuentra en sus tramos finales para implementarse y generar más oportunidades de negocio a partir de información precisa.
Como fuimos viendo a lo largo de este artículo hay una clara división entre los tipos de negocios que requieren autorización y licenciamiento de la SFC y más tiempo para salir al mercado, y aquellos que, al no captar dinero del público, pueden tener un time to market más rápido junto a tarjetas de crédito o prepagas con recursos propios. Y, por supuesto, ¡tienen la posibilidad de pensar a futuro si podrían convertirse en entidades vigiladas por SFC para ampliar su oferta y mejorar la experiencia de sus usuarios!